Los meses de convivencia casi familiar -incluso con algún "desayuno de trabajo"- dan paso a los nuevos tiempos: el último impulso hasta la selectividad, el inicio de otras etapas de estudio, .... Rumbos nuevos pero antes, las vacaciones, las tantas veces invocadas, soñadas en los últimos días.
Así, aunque sabemos que no nos perderéis de vista, que se olvidarán los aoristos radicales, pero seguiremos conservando nuestros lazos, que se alejará la pesadilla de los participios, pero que no olvidaremos las horas que hemos compartido, os deseamos lo mejor de ahora en adelante: a Andronico-Diego, a Cleopatra-Jocelyne, a Ifícrates-Miguel, a Neera-Toñi, a Alké-Alejandra, a Erífile-Irene, a Iseo-David, Euxino-Robert y Cleopatra-Tamara, a los que habéis aprendido griego clásico y también por eso sois especiales.
