
Ningún retrato mejor que a través de los ojos de Velázquez. El patrón de los estudiantes y de los profesores, que seguimos siendo estudiantes, como él, mientras nos quede curiosidad, porque él dijo que "el estudioso es el que lleva a los demás lo que ha comprendido".
Si no conocéis este cuadro, Las tentaciones de Santo Tomás, atribuido al maestro sevillano, id a verlo a nuestra vecina Orihuela, a su palacio episcopal, donde se expone después de años de visicitudes.
Nosotros, los de griego, compartimos con Tomás la afición por las enseñanzas de Aristóteles. A él le debemos la tarea de incorporar al pensamiento medieval cristiano del siglo XIII las enseñanzas de los clásicos, pero también de los pensadores islámicos y judíos. Trabajó por entender las enseñanzas de los que lo precedieron, por evitar los prejuicios que trae la ignorancia. Profesor entregado y antes buen alumno al que imaginamos aprendiendo, como nosotros, griego clásico.